López Puerto es una industria cárnica familiar, exportadora presente en la Unión Europea y fuera de sus fronteras, en países como Japón, China, Brasil, México, Argentina, Sudáfrica, India, Australia, etc....
Cuenta con
2 fábricas en el enclave por excelencia del Ibérico como es Salamanca,
una de ellas dentro de la Denominación de Origen de Guijuelo. Especializada en la
cría, sacrificio, fabricación y comercialización del cerdo ibérico desde 1954, con su amplia gama de productos ibéricos, como son
jamones, paletas, lomos, embutidos y demás productos derivados del cerdo ibérico, curados y frescos, así como sus diferentes formatos envasados al vacío: deshuesados, bloqueados y loncheados. También contamos con productos de alta calidad como son nuestros productos de
Denominación de Origen de Guijuelo, cuna del jamón ibérico. Trabajamos con todo tipo de clientes, desde grandes superficies hasta tiendas de delicatessen, pasando por distribuidores, charcuterías y restauración.
El origen de nuestro trabajo comienza en nuestra granja de selección racial y más tarde en fincas donde nuestro ganado campa en espacios abiertos, esperando, en el caso de nuestros cerdos de bellota, la caída de la misma, para sí poder elaborar nuestro producto estrella:
el jamón de bellota ibérico. Después, nuestros productos, se hacen lentamente hasta alcanzar su madurez y sabor único e inconfundible.
Producir y ofrecer productos nobles de Cerdo Ibérico de alta calidad, es una exigencia prioritaria en López Puerto.
La crianza con métodos tradicionales de los cerdos ibéricos,
en dehesa, se basa en su régimen natural de alimentación;
hierba en primavera, rastrojos de cereales y leguminosas, culminando el encebado con
la bellota y la hierba de otoño e invierno durante la montanera. de esta forma, la grasa producida por este tipo de alimentación es más fluida y se halla mejor repartida entre las haces de las fibras musculares.
los aceites esenciales de la bellota y su aroma terminan incorporándose a la canal. Esta grasa procedente de la bellota no sólo determina el aroma
final del jamón, sino que contribuye, a que en la evaluación sensorial de la degustación,
se aprecie una mayor jugosidad residual, al
estimular exquisítamente las glándulas salivares.
La salazón, el secado natural y la maduración o envejecimiento en bodega.
Una vez producido el corte y pulido los jamones y paletas se ponen en contacto con
sal marinera, enterrando las piezas en pilas de sal. Durante
el salado, tiene lugar la salida de jugo de la musculatura que disuelve la sal, que después, por un mecanismo de difusión hace que se mueva hacia el interior.
Posteriormente y
durante 26 meses, tiene lugar el proceso de
secado natural y de maduración. Debido al grado higométrico del aire y a las variaciones de presión atmosférica aparece una flora, tanto bacteriana como micológica, autóctona de
la Sierra y que llevan a la singular y exquisita maduración de nuestros jamones.
Una vez madurada la pieza, ésta pasa a
nuestras bodegas, para envejecer durante unos
18 meses antes de su salida al mercado.
En las instalaciones de
López Puerto también se fabrican otros manjares como es toda la gama del embutido ibérico.
Secados y curados de forma natural en el corazón de la sierra.